Este periodo está comprendido entre las 3 semanas previas al parto probable y 3 semanas posteriores, cuando comienza el periodo de lactancia.

Durante este periodo se definen muchas cuestiones metabólicas.

En cada una de las etapas la vaca necesita diferentes alimentaciones, desde que terminan la etapa de lactancia, los 30 o 50 días del periodo seco, los 20 días del preparto y el comienzo de nuevo del periodo de lactancia.

Los cambios de alimentación generan diversos cambios en los microrganismos, en la mucosa ruminal etc… Es por eso que la tendencia actual es hacer en la dieta el menor cambio posible.

Desde el final de lactancia, pasando por el periodo seco, hasta llegar al preparto es bueno realizar los menores cambios posibles en la dieta adaptada a cada periodo, y cuando la vaca vuelve a iniciar la lactancia es cuando más atención requiere.

Para las vacas que terminan la lactancia las principales recomendaciones van a ser mantener el consumo de materia seca y de nutrientes, asegurando así el estado corporal del animal.

Es importante, si la vaca termina la lactancia en un estado corporal que no es el adecuado, que esté relativamente delgada, que no se la engorde de manera brusca para no tener problemas en las etapas posteriores.

También es de vital importancia cuidar el confort, el suministro de sombra, agua limpia y fresca, un ambiente que no tenga barro. Todo lo que genere estrés generará mal estar en la vaca y se verá reflejado en las condiciones físicas del animal.

Después pasaremos al periodo de vaca seca que durara entre 30 y 50 días en la que no produce leche pero comienza a disminuir el consumo por el alto desarrollo fetal con unos requerimientos específicos, donde las recomendaciones también serán de mantener la dieta adecuada intentando que el animal mantenga su peso, sin adelgazar ni engordar. Este es un periodo de baja eficiencia de trasformación de los alimentos.

La siguiente etapa es el Preparto, donde lo más recomendable es comenzar a vigilar la vaca más atentamente y donde disminuye un 20% el consume de materia seca. En esta etapa de una semana o 10 días previos al parto, cuando comienza el máximo desarrollo fetal, disminuye el consumo, siendo muy difícil mantener el estado corporal; la vaca comienza a movilizar reservas corporales para mantener el desarrollo fetal. En esta etapa también es fundamental cuidar el confort y disminuir todas las fuentes de estrés.

Uno de los mayores problemas que encontramos en las vacas en general son los efectos de la Hipocalcemia Subclínica en donde no vemos o notamos que la vaca está enferma pero si está siendo afectada por una menor concentración de calcio.

El calcio influye mucho en distintos aspectos como la contracción muscular, y concretamente el musculo liso, que es de los órganos digestivos, que puede llegar a ser responsable de menor consumo de materia seca porque el animal va a tener menos rumia y por lo tanto va a tener menor digestión de los alimentos.

La Hipocalcemia Subclínica también suele haber elevada concentración de cortisol; esta hormona esta altamente relacionada con el estrés y que también va a tener un impacto sobre la capacidad inmunológica.

En próximos artículos completaremos el pequeño análisis sobre el poderío transitorio de la vacas.

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